La zurdera es una característica del niño que no se puede ni se debe corregir.
Los estudios indican que entre un 12 y un 15% de la población mundial infantil es zurda.
Una persona zurda es la que tiene preferencia por usar la mano izquierda para una variedad de acciones como coger, alcanzar, echar, jugar, señalar, escribir y manipular. También incluye una predilección por preferir el pie izquierdo para dar el primer paso para caminar, montar en triciclo, patear una pelota, saltar a la comba, etc. Por norma general, ser zurdo significa tener en algún grado un dominio del lado derecho del cerebro. Hace años, un niño zurdo no era visto con normalidad. Se pensaba que la zurdera era un problema de salud. Hoy en día, ya se sabe que la zurdera no es una enfermedad. Es apenas una característica del niño que no se puede ni se debe corregir.
Cuándo se detecta la zurdera infantilNormalmente es en la escuela que se detecta que un niño es zurdo, porque es cuando él empieza a utilizar las manos con más frecuencia. Hasta los 3 o 4 años, los niños utilizan las dos manos indistintamente. Para comprobar si un niño es zurdo o diestro hay que observar qué mano, pie u ojo utiliza él cuando:- Chuta un balón- Se cepilla los dientes- Se peina- Lleva un vaso- Salta a la comba- Tapa o destapa un frasco- Mira por un caleidoscopio- Escribe- Hace una foto.
El ojo, la mano o el pie elegido naturalmente para realizar las acciones suele ser la dominante.
El niño ya nace diestro o zurdo.
Un niño es zurdo no porque él lo decidió así. Los expertos confirman que una persona es diestra o zurda desde el momento en que nace.
Muchos padres se preguntan si existen técnicas para que puedan cambiar el dominio de la mano izquierda de su hijo para la derecha, como si eso se tratara de una decisión del niño o de la niña. El dominio de la mano, sea derecha o izquierda, lo determina el cerebro.
El lado derecho controla la mano izquierda y el izquierdo la mano derecha. Por esta razón, a un niño zurdo no se le puede obligar a que escriba con la mano derecha. No existe entrenamiento alguno que lo haga cambiar. Por muchos esfuerzos que se haga, el niño seguirá tendiendo a usar su mano izquierda para la realización de acciones ya que esto es parte de su naturaleza y no de un hábito o una costumbre que él haya adquirido. Si se obliga a un niño a utilizar la mano más débil y menos hábil en la realización de las tareas, los resultados pueden ser frustrantes para él.
Le agotará sin razón y le hará más torpe. Cambiar las preferencias laterales del niño conlleva desventajas como dificultades para distinguir la derecha de la izquierda, trastornos en la escritura, dislexia e incluso tartamudez. La principal preocupación que existe en cuanto a la zurdera es de adaptabilidad de los niños a un mundo hecho en su mayoría para los diestros.
martes, 17 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Pequecomentarios